Estamos acostumbrados a oír hablar de diferentes tipos de coches, de sus acabados, y sobre todo de términos que se ponen de moda para referirnos a las nuevas líneas que salen en el sector de la automoción. Todos conocemos conceptos como Sedan, SUV, 4×4, Berlina… pero, ¿a qué nos referimos cuando hablamos de un coche hatchback? ¿Qué tipo de carrocería es esta?
Hatchback como concepto
Denominamos hatchback a los coches compactos con dos volúmenes, en el que el portón trasero se considera una puerta más e incluye el cristal trasero. De esta manera si hablamos de un coche de dos puertas laterales, sería un “tres puertas” y si hablamos de un coche de cuatro puertas laterales, sería un “cinco puertas”.
Este portón se abre hacia arriba dando acceso al maletero, resaltando que la curvatura del techo en la parte trasera baja y se acentúa.
Debido a sus características tan específicas, no son coches que se encuentren en todos los segmentos, suelen pertenecer al segmento C, aunque encontramos modelos de segmento A y B, con versiones que se adaptan a esta carrocería.
En definitiva y para entendernos, los coches hatchback serían los conocidos como compactos de toda la vida.
Principales características de estos coches
Muchos coches hatchback tienen asientos traseros abatibles, por lo que podremos cargar objetos más grandes pese a tener un coche compacto, en el que ahorramos largura, algo importante para muchos clientes a la hora de buscar un coche fácil de maniobrar y estacionar. Además la bandeja suele desmontarse.
A menudo se suelen confundir los familiares con los hatchback, en lo que a sus características principales se refiere, claramente no por sus dimensiones pero si por el acceso a los maleteros como pasa con las conocidas rancheras.
La luneta trasera en los coches familiares suele ser más vertical y en los compactos está más inclinada para estilizar la forma del coche.
Además los familiares suelen tener una distancia de la rueda trasera al final del maletero mucho mayor, que les permite aumentar la capacidad de carga y les ayuda a entrar a segmentos mayores.
Los coches hatchback no tienen la misma aceptación en todos los países, de hecho en algunos existe la estigmatización al coche compacto o utilitario, posicionándolo como un coche inferior pese a no serlo. De ahí a meter el concepto más deportivo como sportwagon.
Ventajas de comprar un hatchback
- Coches prácticos, utilitarios y más económicos.
- Menor consumo de combustible dado su tamaño.
- Concepto de coche muy urbano, cómodo para maniobrar y aparcar en ciudades concurridas.
- Diseño de techo más alto, resta deportividad pero aporta mayor comodidad a los pasajeros en el interior del coche.
- Conexión directa con el habitáculo del maletero.
Diferencia entre hatchback y liftback.
La diferencia se encuentra en que los coches liftback pretenden aparentar tener tres volúmenes, de manera que aunque tienen un portón que abre todo el maletero, y que se comunica internamente, su estética es como en los sedan con maletero independiente.
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